OPINIÓN: La vida después de Kobe empieza para los Lakers

La carrera de Kobe Bryant llegó a su fin en la NBA el miércoles pasado, y los recuerdos para el ahora exjugador de los Lakers siguen latiendo entre los aficionados.

Los confetis, las celebraciones, los videos en honor al jugador en las pantallas gigantes en las arenas del país, los regalos, cada grito de “Kobe, Kobe”, forman parte del recuerdo de quien es considerado como uno de los mejores jugadores en la historia de la NBA.

El quinteto angelino no clasificó a playoffs; su última vez fue en 2012-13, cuando fue barrido en la primera ronda ante los Spurs.

La sensación de ver culminada la carrera de uno de los mejores jugadores en la historia es agridulce, pues sale a su modo, jugando.

Esta no la era manera como los Lakers hubiesen querido despedir a Kobe, con el peor récord en la historia del equipo, pero al mismo tiempo servirá de motivación para que la familia Buss y la organización en general busquen la manera de regresar a los tiempos dorados.

El futuro es incierto, pero con el contrato de Kobe terminado, mucho dinero se hace disponible y los Lakers vuelven a ser atractivos para el mercado de jugadores.

La base actual es buena, con un Julius Randle que ha mostrado un crecimiento importante en su segundo año en la liga, y un D’Angelo Russell al que le falta crecer mucho.

Además de las contribuciones de Lou Williams, Tariq Black, el veterano Marcelo Huertas y Jordan Clarkson, quien es una realidad, los Lakers pueden ser atractivos para jugadores de alto nivel que aspiran a un campeonato.

Debido a que Nick Young casi no tuvo aportación en el cierre de temporada, se podría esperar que el equipo piense partir con el mismo jugador, algo que considero un error. Mientras que el ala-pívot, Brandon Bass, y el centro Robert Sacre podrían ser un buen elemento para usar en un canje, al igual que Roy Hibbert. Ryan Kelly y Larry Nance Jr. han demostrado que pueden aportar saliendo desde la banca.

Metta World-Peace podría ser una voz de experiencia en el vestidor, pero sus mejores momentos ya pasaron.

Sin embargo, esta base no está lista para campeonar; hay muchos jóvenes, y si la familia Buss espera celebrar pronto, deberá traer por lo menos a tres jugadores que corrijan el camino de la franquicia.

Con Kobe dando su último adiós, Lakers saluda al futuro… uno aún incierto y cargado de mucho trabajo.